España venció ayer a Italia en la tanda de penaltis y superó los cuartos de final por vez primera en 24 largos años.
Fue un encuentro con tensión y pocas ideas. Los empujones de España se vieron frustrados una y otra vez por Buffon y la propia indefinición en el último pase y la falta de movilidad de los atacantes. Provocada en gran medida por la férrea defensa azzurra.
Por su parte, Italia trataba de aprovechar los contraataques buscando rápidamente su máxima referencia en ataque, la cabeza de Luca Toni. La defensa española cubrió bien el peligro -Senna y Marchena estuvieron soberbios-, y lo que no puedo solventar, se arregló gracias a los prodigiosos guantes de Casillas.
Tras 120 largos y tensos minutos, nos encontramos precisamente ante la más extrema forma de tensión en el fútbol, el modo último de decidir una eliminatoria. La crueldad es máxima, un error se paga muy caro. Y lo pagaron De Rossi y Di Natale, por culpa de la ya conocida habilidad del meta español. Güiza no pudo transformar el suyo, pero Cesc demostró que a sus 21 años tiene la capacidad de asumir la responsabilidad de un veterano capitán y transformó el penalti que permitía a España romper con su maldición en los cuartos de final. En semifinales espera Rusia.
Aquí podeis ver un extenso resumen del encuentro:
http://www.veoh.com/videos/v14259316hzPGhF2j
Fue un encuentro con tensión y pocas ideas. Los empujones de España se vieron frustrados una y otra vez por Buffon y la propia indefinición en el último pase y la falta de movilidad de los atacantes. Provocada en gran medida por la férrea defensa azzurra.
Por su parte, Italia trataba de aprovechar los contraataques buscando rápidamente su máxima referencia en ataque, la cabeza de Luca Toni. La defensa española cubrió bien el peligro -Senna y Marchena estuvieron soberbios-, y lo que no puedo solventar, se arregló gracias a los prodigiosos guantes de Casillas.
Tras 120 largos y tensos minutos, nos encontramos precisamente ante la más extrema forma de tensión en el fútbol, el modo último de decidir una eliminatoria. La crueldad es máxima, un error se paga muy caro. Y lo pagaron De Rossi y Di Natale, por culpa de la ya conocida habilidad del meta español. Güiza no pudo transformar el suyo, pero Cesc demostró que a sus 21 años tiene la capacidad de asumir la responsabilidad de un veterano capitán y transformó el penalti que permitía a España romper con su maldición en los cuartos de final. En semifinales espera Rusia.
Aquí podeis ver un extenso resumen del encuentro:
http://www.veoh.com/videos/v14259316hzPGhF2j
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